El sentarse por ahí con las botas amarillas puestas en la posa y la angustia, la pena la confusión la sonrisa falsa… ¿qué pasa? La soledad, te fuiste, quedé solo y vulnerable qué patético suena. ¿Por qué? Un ojo nada más que un ojo pero las retinas las pupilas grises las ganas de inmolar. Te quiero te amo te adoro y me obsesiona la sola idea 


Me fascina la idea de…
Sen-tir-te. Abrazarte. Nada más...
Tus labios dormidos tus besos en sueños y nada más. 

Confusión, depresión, exceso, ojeras, insomnio, tabaco, olor a óleo, acrílicos y hasta lienzos de cartón de madera entelado.

No soy yo. Lo deseaste y lo obtuviste. Me enfermaste. 

Es una marioneta, a fin de cuentas… Le falta voz por eso. Existe para satisfacer tus deseos. Aún siendo tan egoísta. Tan yo.